Meditando después, pensé que lo importante no es tanto el deseo sino desarrollar esa primera jugada. El segundo ingrediente sería, para mi, el comprometerse con ello.
Mientras permanecemos al borde de las cosas, dudando si hacer o no, el Universo asume la siguiente actitud:” Veo que no te estas tomando las cosas muy en serio. Cuando te comprometas, recibirás ayuda”.
“Todo lo que puedas hacer, o sueñes poder hacer…empieza hacerlo. En la temeridad hay genio, poder y magia.” Goethe
En el momento en que decimos: “¡Voy a hacerlo, cueste lo que cueste!, de una u otra manera invocamos a ese genio, poder, magia… La vida de Gandhi es la prueba de que una sola persona comprometida puede cambiar la historia de una nación.
Cuando inicio un proceso de coaching, en la alianza que establezco con mis clientes siempre hago, entre otras, una petición de compromiso del cliente con el proceso. Esto lo hago porque uno no obtiene lo que dice que quiere, sino aquello a lo que está comprometido. Las acciones develan el compromiso. Compromiso es lo que uno hace. Compromiso es acción.
Si estoy comprometido con aprender, observaré un mundo que se abre a mi paso, en la emoción de la curiosidad. Pero por si el contrario, estoy comprometido con tener la razón, entonces observaré un mundo estático y rígido, donde lo que coincide con mi opinión lo veo claramente, y lo que no, permanece transparente a mi experiencia.
Para terminar, traigo un texto de W.N. Murray que habla sobre el compromiso y esa magia del Universo.
“Hasta que uno se compromete hay duda,
la posibilidad de retroceder
siempre se queda sin efecto
siempre es inefectiva
no siempre es adecuada
la permanente falta de efectividad.
siempre se queda sin efecto
siempre es inefectiva
no siempre es adecuada
la permanente falta de efectividad.
Para todo acto de iniciativa (y creación)
existe una ley elemental,
cuyo desconocimiento mata innumerables ideas
y planes espléndidos:
que en el momento en el que uno se compromete en definitiva,
también la Providencia actúa.
Para auxiliarnos ocurren todo tipo de cosas
que de otra manera no hubieran sucedido.
Todo un caudal de acontecimientos derivan de la decisión,
suscitándose a favor nuestro toda suerte
de incidentes y encuentros imprevistos
y asistencia material,
que jamás hubiéramos imaginado
que pudieran cruzar nuestro camino.”
existe una ley elemental,
cuyo desconocimiento mata innumerables ideas
y planes espléndidos:
que en el momento en el que uno se compromete en definitiva,
también la Providencia actúa.
Para auxiliarnos ocurren todo tipo de cosas
que de otra manera no hubieran sucedido.
Todo un caudal de acontecimientos derivan de la decisión,
suscitándose a favor nuestro toda suerte
de incidentes y encuentros imprevistos
y asistencia material,
que jamás hubiéramos imaginado
que pudieran cruzar nuestro camino.”
Lourdes Morales
Coach Co-Active CPCC
Desarrollo Personal y Profesional
Buenas tardes Lourdes, mil gracias por tan esplendido reconocimiento de gran amigo, así lo siento y lo trato de ejercer contigo.
ResponderEliminarTe agradezco que hayas escrito este post que sin duda da respuesta a nuestra conversación de anoche. Es más después estuve viendo el programa REDES en la entrevista a Mr. Robinson y coincide plenamente con lo que has escrito.
Hemos de aceptar la incertidumbre como parte de nuestro camino y saber encontrar ahí como re-inventarnos y quitarnos capas de cebolla.
Sólo desde el compromiso y aunque no sepas como hacerlo "la vida" estará al lado de los valientes (no temerarios), de los que deciden descubrir y explorar nuevas formas y fondos.
Lo dicho gracias y celebremos que hoy es hoy desde nuestro compromiso con nosotros y con la sociedad.
Besos grandes Lü!
Decide siempre a favor de lo desconocido, cualquiera que sea el riesgo, y crecerás continuamente.
ResponderEliminarGracias Diego.
"El que persevera, vence."
ResponderEliminarEfectivamente, cuando se adquiere un compromiso del tipo que sea y en el ámbito que sea, es cuando realmente se está INTERESADO porque algo funcione.
La perseverancia debe acompañar a ese compromiso pues, sin ella, éste no tiene sentido.
Cuando dudamos, flojeamos. Y cuando surgen las oportunidades, si no estamos verdaderamente comprometidos con la idea, entonces reculamos.
Las cosas están ahí, en el huerto, para que las tomemos y nos las comamos a bocados.
Nada de mordisquitos.
Jajajaja, me encanta Tati. Buenísimo.
ResponderEliminarPues nada a comernos a bocados la vida.
Besos.
Excelente post!
ResponderEliminar