6 feb 2012

ABRIRSE AL MUNDO PROVOCA MIEDO.


Abrirse provoca miedo.

Uno de los mayores miedos que todos experimentamos, es que cuando nos abrimos nos invadirán, abusarán  o se aprovecharán de alguna forma de nosotros. Todos deseamos abrirnos pero no queremos que nos hagan daño.

Sin embargo, aunque nuestro deseo profundo es  esa apertura nos mantenemos en nuestro mundo aislado, protegido y cerrado, de ese modo  intentamos que no nos hieran, pero si te das cuenta eso no funciona y lo más penoso es que si nos aislamos nos perdemos la vida y vivirla intensamente.

Cuando salimos del aislamiento y nos damos cuenta de que aprender a relacionarnos es parte de nuestra curación, una de las tareas que tenemos es aprender a respetar. Respetarnos a nosotros mismos y a los demás.

Generalmente no nos respetamos los unos a los otros. ¿Por qué? Porque nuestras necesidades de supervivencia nos ciegan. Si todos viviéramos nuestra naturaleza esencial, si viviéramos vidas totalmente conscientes, podríamos existir en un estado de apertura, vulnerabilidad y perfecta inocencia. Lamentablemente el mundo que la mayoría percibe no es así, estamos convencidos de que para sobrevivir tenemos que cuidarnos.

Hemos creado un mundo donde impera la conciencia de escasez, de carencia, de acumulación, de información es poder, de ande yo caliente y ríase la gente, de amor estancado. Si no piensas, sientes o actúas como “socialmente es correcto” eres excluido del clan, este es el mundo que hemos creado.

Cuando observo esto me alegro de haber salido de ese aislamiento, de pensar, sentir y actuar diferente a lo que el clan espera de mí. No soy oveja, hace tiempo que dejé de serlo. Soy un águila que vuela feliz por los cielos infinitos, soy león que corre a lo largo y ancho de la tierra, compartiendo, vivenciando, experimentando, siendo feliz. Veo un mundo de oportunidades, de solidaridad, donde la unión de muchos hace la fuerza, donde si yo doy lo mejor de mi y tú lo mejor de ti, no sumamos, estamos multiplicando.  Y desde esta nueva perspectiva hay un profundo respeto al otro,  a su proceso de vida, a sus elección sean las que sean.

Platón, en su libro La República narra por boca de Sócrates el famoso “Mito de la Caverna”. En esta genial explicación metafórica, Platón explica su teoría de cómo con conocimiento podemos captar la existencia de los dos mundos: el mundo sensible (conocido a través de los sentidos) y el mundo inteligible (sólo alcanzable mediante el uso exclusivo de la razón). Esta alegoría pone de manifiesto cómo los humanos podemos engañarnos a nosotros mismos o por la fuerza de poderes fácticos. 

Para quien tenga interes en investigar sobre esto hay mucha literatura a lo largo de la historia donde filósofos, escritores, directores de cine se extienden en ello con maestría.

Algunos de los muchos títulos: 
La vida es sueño, de Calderón de la Barca. Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis Carroll. Un mundo feliz, de Aldous Huxley. El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas (1985) de Haruki Murakami. La caverna, de José Saramago. El Alquimista, de Paolo Coelho, El poder del Ahora, de Ecktar Tolle, El señor de los Anillos, de Tolkien...etc.

Y en cine:
La trilogía cinematográfica Matrix. El Show de Truman, Desafío Total, Abre los ojos, El Señor de los Anillos en versión cinematográfica, Y tú que sabes!?...etc.





Este viaje que les propongo, y que juntos debemos hacer, no es a la luna ni a las estrellas; de hecho, la distancia que nos separa de las estrellas es mucho menor que la distancia entre nosotros. Descubrirse a sí mismo no tiene fin y requiere constante investigación, percepción total, darse cuenta sin elección alguna. En realidad, este viaje consiste en abrir una puerta al individuo en su relación con el mundo.

J. Krishnamurti

LOURDES MORALES
Coach Co-Active CPCC
Desarrollo Personal, Profesional y de Equipos.

4 comentarios:

  1. Hola Lourdes, como siempre es un placer recibir otro regalo tuyo, que nos hace reflexionar y ojalá, ser cada un día un poco mejores...
    Yo también creo haber recorrido algo de ese camino hacia mi esencia, desde donde se puede encontrar la autenticidad y la autoconfianza, que para mi son fundamentales para abrirse...
    Creo que cuando estamos alineados con eso, somos menos vulnerables, por que no tenemos nada que ocultar, por que nos mostramos tal y como somos...
    El problema que yo veo es que si bien esa postura frente a la vida, nos da más paz y serenidad, al estar insertos en el mundo competitivo y egoísta en el que estamos, no nos evita dolores ni fracasos o frustraciones, ni nos garantiza nada en la vida... o al menos ese camino yo aún no lo he recorrido...

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    1. Hola Juan, pasito a pasito vamos haciendo el camino y la vida es lo que es con su luz y con sus sombras. No puede haber uno sin lo otro. Así que en esos momentos de conflicto sólo nos queda encontrar dentro de nosotros un oasis de paz o los pensamientos se perderán en ataques a la vida, lo que nos hace sufrir porque nosotros somos la vida.
      Así que respira profunda y lentamente varias veces, distiende el cuerpo y relájate, vaciate con la respiración como si de ti saliera toda la historia y disfruta de un momento de silencio que traerá paz interior.
      Muchas gracias de todo corazón por tu comentario.

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  2. Me gusta intentar caminar por esa senda.
    Creo estar al inicio de algo que me llevará a ser más feliz, a estar más satisfecha conmigo misma, a estar más en armonía con la naturaleza.
    Queda mucho por recorrer pero el comienzo es muy importante.

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    1. El camino es más fácil de lo que parece, somos nosotros lo que lo hacemos complicado.
      Simplemente elige entre estar en paz o estar en conflicto, no hay más.
      Gracias Tati.

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