17 feb 2013

QUIERO SER, QUIEN SÉ QUE PUEDO SER.



 
LA PIRÁMIDE DE MASLOW
 

Teniendo en cuenta la Pirámide de Maslow, cuando tenemos cubiertas nuestras necesidades fisiológicas, de seguridad, sociales y de estima el paso final en el proceso de crecimiento y maduración personal es la Autorrealización.

 
 
 LA AUTORREALIZACIÓN
 

 
La Autorrealización es una alta aceptación de uno mismo, de los demás y de las situaciones “tal como son”. La Autorrealización es el camino de regreso a casa, es la Liberación de nuestro personaje egoico, de nuestras creencias limitantes. La Autorrealización es abrir la puerta o hacer desaparecer los barrotes de  la jaula que hemos creado imaginariamente y en la que nos sentimos realmente encerrados.
 
 
¿QUIEN SOY?
 
 
 
Conocer y contactar con nuestra verdadera identidad, con lo que somos en esencia, con nuestra naturaleza primigenia.

Vivir en plenitud, en todos nuestros ámbitos y facetas, de acuerdo con todo lo que son. Convertirse en todo aquello que somos en potencia en base a nuestro contenido interior, disfrutando del momento presente, con un sano sentido de la autoestima, una fuerte curiosidad por las personas y las cosas y una profunda conciencia de los sentimientos propios y de los demás, es lo que caracteriza a las personas Autorrealizadas.

Ser quien sé que puedo ser, ser más yo, ha ido quedando desplazo por los deberes y las exigencias externas hasta el punto de que ha quedado olvidado. La respuesta ante ¿quién soy yo? suele estar muy indefinida.

No somos lo que pensamos, somos mucho más que eso, la mente nos encasilla con ideas y creencias e impide que aflore todo nuestro potencial. Desde niños nos hemos ido programando para ser lo que quieren que seamos, y esto ha creado condicionamientos en nuestro inconsciente que nos impide reconocernos como lo que realmente somos.
 
 
EL DESARROLLO PERSONAL
 

 
El Desarrollo Personal nos aporta estabilidad psicológica, fuerza y confianza en nosotros mismos. La autorrealización, es un camino de autodescubrimiento que nos va revelando el sentido de nuestra vida y nos devuelve a la esencia de nosotros mismos, con nuestra autenticidad.

Hace más de 2000 años unas palabras atribuidas a Sócrates quedaron inscritas en el Templo de Delfos. “CONÓCETE A TI MISMO”. Debemos aprender todo lo que podamos sobre nosotros mismos ¿quién creo que soy y cuál es la verdad?, ¿qué es proyección, qué es realidad?, ¿qué hay detrás de lo que veo de mí?

Conocerse a si mismo, es un camino en la emocionante aventura que te llevará a tu crecimiento personal.
 
Una clave importante: no vivamos el cómo soy; busquemos qué soy; y después, quién soy.
 
En la medida que descubro lo que Soy, veo también lo que no soy. Entonces adquiero poder sobre esto que no soy (el "personaje" o una serie de ellos).
 
Antonio Blay decía: “Tú crees ser alguien”. Y esa es una clave de conciencia. Darse cuenta. Esto que está funcionando es nada más que una máquina social, a la que llamamos “yo”. "Por ello es importante ver lo que no eres y vivir lo que si Eres". "Mientras vivas en lo que sientes, mal. Vive en lo que Eres detrás de lo que sientes".


LOURDES MORALES
CO-ACTIVE COACH, CPCC
Coaching para el Desarrollo Personal, Profesional y de Equipos.

11 feb 2013

EL COACHING, MUCHO MÁS QUE UNA MODA.




Leí esta entrevista y me apetece compartirla en este blog, espero que os interese.

"El coaching, es un proceso que tiene como objetivo potenciar el talento de las personas y su crecimiento personal"

- “El coach te acompaña para que descubras por ti mismo lo que tienes que hacer”


Entonces, ¿qué es el coaching y para qué sirve? María López, presidenta de la Federación Internacional de Coaching en España (ICF) nos aclara en que consiste esta técnica: “Es un proceso que tiene como objetivo potenciar el talento de las personas y  su crecimiento personal”. 

Ayudar a alcanzar esa meta es el trabajo del coach, quien a través de la conversación consigue que sea el cliente el que pueda dar respuesta a sus propias preguntas. “El coach te acompaña para que descubras por ti mismo lo que tienes que hacer”, explica María López.
  
A pesar de la crisis o, mejor, gracias a ella, el fenómeno del coaching está creciendo de manera exponencial en España. En los últimos tres años el número de asociados a ICF ha aumentado un 58%.

Y aunque su implantación es cada vez mayor, todavía existen muchas dudas en torno a esta técnica que tiende a confundirse con otras disciplinas que también tienen como objetivo ayudar a las personas:
  
-No es consultoría. El consultor es una persona experta en determinados temas que aconseja a los clientes para que puedan mejorar, algo que no hace el coaching. “En realidad el coach solo actúa como un espejo para que cada persona se vea mejor”, nos dice Javier Carril.

-No es psicología. Los psicólogos tratan a enfermos o personas con algún tipo de problema, los coaches ayudan a alcanzar retos: “Nosotros no hacemos tratamientos – puntualiza María López- no tenemos pacientes, tenemos clientes”.

-No es mentorización. La labor del mentor es trasmitir algún tipo de conocimiento algo que no es labor del coach.

Tradicionalmente esta disciplina se relaciona con el mundo de la empresa y la alta dirección -es lo que se conoce como coaching ejecutivo-, de hecho es en este ámbito donde, mayor desarrollo ha tenido en los últimos años.

Sin embargo, cada vez es más frecuente que particulares recurran al coaching para resolver asuntos personales. Aprender a controlar la ira, solucionar problemas de pareja, mejorar la comunicación madre e hijo o superar casos de extrema timidez son algunas de las situaciones que pueden solucionarse con ayuda de un coach.

En la actualidad, el coaching no cuenta con unos estudios reglados, pero si existen cursos homologados por instituciones como la Federación Internacional de Coaching o la Asociación Española de Coaching.

Tal y como explica María López, hay cuatro habilidades que definen a un buen coach: la escucha activa; la empatía; la capacidad de comunicación y la capacidad de generar confianza.

El proceso se suele realizar en 10 ó 12 sesiones que se prolongan durante una media de seis meses. Los precios varian entre los 70 y 200 euros por sesión, si se trata de un tratamiento personal, o los 250 de media en el caso del coaching ejecutivo.  

Lo fundamental es que el cliente esté dispuesto a trabajar, “La persona tiene que estar comprometida con su proceso. Es la persona la que tiene que solucionar su vida".


LOURDES MORALES
Co-Active Coach, CPCC.
Desarrollo Personal, Profesional y de Equipos.