30 nov 2010

¿SABES CÓMO MANIPULAS A LOS DEMÁS?

Hoy comentaré las estrategias que solemos utilizar cuando no conseguimos que se cumplan nuestras expectativas. Cuando esto ocurre podemos elegir: o sentir dolor por no conseguirla o, como sucede normalmente, hacer uso inmediato y de forma inconsciente de una estrategia.

Nuestra inconsciencia en relación a nuestras estrategias nos provoca mucho sufrimiento y usamos estas para evitar sentir ese miedo o ese dolor. Estamos convencidos de que esa es la forma de poder sobrevivir y que no es seguro abrirse y ser vulnerable. Sin embargo, esto tiene consecuencias y es que los otros reaccionan a nuestras estrategias.

Hay varios tipos de estrategias que vamos a ir viendo poco a poco en este blog. La primera de las estrategias de la que voy hablaros es:

ESTRATEGÍA DE LA EXIGENCIA Y CONDENA.

Cuando no se consigue lo que quiere surge el enfado y exige.

La exigencia dice: “Yo me lo merezco, lo quiero ahora y no me importan tus necesidades o tus excusas”.

La energía de la exigencia y de la condena es agresiva. Usamos ambas para intimidar y dominar a la otra persona y así conseguir lo que queremos. Detrás de la condena está la exigencia de que la otra persona cambie, de esta forma no tenemos que sentir el dolor de no conseguir lo que queremos y no tenemos que responsabilizarnos de nuestro papel en esta situación. Por el contrario, podemos culpar a otra persona.

Se necesita tomar conciencia de manera muy clara para poder regresar esa energía dentro, sentir el dolor de no conseguir lo que queremos en ese momento y darnos cuenta de cómo estoy contribuyendo yo a esa situación.

Hay una línea muy fina entre expresarnos con pasión y culpabilizar; es más fácil lanzarse a un ataque de la otra persona en lugar de sólo expresar nuestro dolor y nuestra frustración.

La exigencia y la condena, generalmente provoca que los demás se sientan intimidados o enfadados y se cierren. Eso hace aumentar nuestro pánico y también el pánico del niño interior de la otra persona, y entonces sale esta exigencia y esta condena con más fuerza aún.

En próximos capítulos escribiré sobre otras estrategias como la de la manipulación, la de la súplica, la de la venganza y la de la resignación.

Lourdes Morales
Coach Co-Active
Desarrollo Personal y Profesional

25 nov 2010

LAS EXPECTATIVAS (2ª Parte)...EN LA PAREJA

En las relaciones de pareja es de importancia el papel vital que tienen las expectativas sobre lo que pueden esperar del otro, lo cual puede perdurar por años deteriorando la satisfacción, ya que nos lleva a esperar mucho más de lo que verdaderamente vamos a encontrar  en la convivencia diaria. 

Algunas expectativas comunes son:
  • El amor romántico siempre será el pilar que sostendrá la relación (y este durará por siempre).
  • Mi pareja sabrá lo que yo quiero sin que se lo diga.
  • El amor es igual y suficiente para una buena relación sexual.
  • Cuando me case/cuando tenga un compañero(a) no voy a sufrir penalidades ni frustraciones.
  • Mi pareja me compensará por todas mis frustraciones pasadas.
  • Mi pareja siempre estará de mi parte, siempre me será fiel (bajo cualquier circunstancia), y siempre será indulgente cuando mi comportamiento no sea correcto.
  • Mi pareja y yo seremos inseparables, siempre estaremos juntos y lo compartiremos todo.
  • Mi pareja me hará feliz.
Cuando se ponen demasiadas expectativas en los demás es fácil que la decepción aparezca.

Esperar mucho del otro puede, estar relacionado con pedirle que cubra necesidades o carencias que tenemos y no reconocemos y que pertenecen a nuestra historia afectiva. Otro problema es cuando la otra parte tiene mucho que ofrecernos; eso puede hacer que creas que tenemos poco para dar; entonces sobrevaloramos a la pareja y caemos en la dependencia. Aunque hay diferentes matices, todos esperamos lo mismo: ser queridos tal y como somos y que el otro no nos pida más de lo que podemos dar.

Es por ello muy importante identificar y trabajar desde el amor y la compasión en identificar y cambiar estas expectativas, para alcanzar un mayor equilibrio y satisfacción en la convivencia diaria.

“No he venido a este mundo a cumplir tus expectativas.
No has venido a este mundo a cumplir mis expectativas.

Yo hago lo que hago.
Tú haces lo que haces.
Yo soy yo, un ser completo aun con mis carencias.
Tu eres tú, un ser completo aun con tus carencias.

Si nos encontramos y nos aceptamos,
si nos aceptamos y nos respetamos,
si somos capaces de no cuestionar nuestras diferencias
y de celebrar juntos nuestros misterios,
podremos caminar el uno junto al otro;
ser mutua y respetuosa, sagrada y amorosa
compañía en nuestro camino.

Si eso es posible puede ser maravilloso.”
                                                                                             
Fritz Perls

Descubre alguna de tus expectativas.
¿Cómo queremos que alguien esté a nuestro lado en el aspecto emocional? ¿Qué expectativas tenemos de que la otra persona sea fuerte, clara, centrada, segura de sí misma y se mantenga en “su energía”? ¿Qué expectativas tenemos respecto al sexo? ¿Es espiritual nuestra pareja? ¿Qué expectativa tenemos de que la otra persona sea alegre, creativa y positiva en la vida? ¿Qué expectativas tenemos de que la otra persona sea capaz de ponernos límites?

Según las vamos repasando podemos ir viendo la carga más ligera o más fuerte que sentimos en nuestro cuerpo. 

20 nov 2010

LAS EXPECTATIVAS (1ª Parte )


El origen  de nuestras reacciones y nuestras  exigencias proviene de nuestras expectativas. Todos tenemos expectativas respecto a los demás, pero si se mantienen de forma inconsciente destruirán toda la armonía y la intimidad que deseamos crear. Convierten a la otra persona en objeto de nuestros deseos.

En lugar de sentir nuestro miedo y dolor, nos sentimos victimas de la gente, las situaciones y la vida.

Para conseguir más conciencia de nuestras exigencias debemos explorar nuestras expectativas.
Muchas veces confundimos SUEÑOS con EXPECTATIVAS sin darnos cuenta que, mientras los sueños nos abren el mundo, las expectativas nos encierran en la espera pasiva de lo deseado.

¿Por qué nos aferramos sorprendentemente a ellas?
¿Qué pasa si no puedo aceptar tener que renunciar a lo que "tanto deseo"?
¿Qué pasa si siento que no puedo realizar mi proyecto de vida?

Tenemos un deseo determinado.
Queremos algo con el alma, con todo nuestro ser. Soñamos día y noche con tenerlo.
Este es el momento de aplicar una regla básica:
LA REGLA DEL OSO NECIO de Jorge Bucay.

Esta regla comienza con la "O" del oso.
¿Usted quiere algo?
OBTENGALO!!!
"OBTENGA" lo que usted quiere, juéguese la vida para obtenerlo!!! Corra el riesgo!!!, comprométase con su deseo!!!

¿Qué busca? ¿El amor de ésa persona "tan especial"?. ¿Esa casa "tan soñada"?. ¿Ese trabajo?.
VAYA, SALGA A BUSCARLO Y OBTENGALO!!

Pero., uno puede darse cuenta que a veces
es imposible obtener  lo que quiere. Entonces,
 ¿qué dice la regla en segundo lugar?
¿No puede "OBTENER" lo que quiere?.
Y siguiendo con la "S",  la segunda letra del oso nos dice: SUSTITÚYALO!!!

"SUSTITÚYALO" por otra cosa !!!
- Esa persona "tan especial y única" no me quiere. Pues bien, que lo quiera otra persona.
- Esa otra tampoco me quiere, pues a seguir buscando y en el último de los casos cómprese una mascota!!!

- Ah. No!!! IMPOSIBLE SUSTITUIRLA!!!
"Como ésa persona no hay."
Entonces, ¿qué nos dice la regla en tercera instancia?.
¿No lo pudo "OBTENER"?.
¿No lo puede "SUSTITUIR"?.
Y siguiendo con la "O", la tercera letra del oso nos dice: OLVÍDELO!!!

-Ah No, "Imposible". ¿Cómo imposible?
- Siii, "Imposible olvidarla !!!"
Éso si que es i-m-p-o-s-i-b-l-e!!!"

Ahhh. "¿Imposible?"
Entonces, si no lo puede OBTENER,
si no consigue SUSTITUIRLO,
si no quiere OLVIDARLO
la "REGLA" dice que Ud. es un "NECIO".

Quedando así constituida
"LA REGLA DEL OSO NECIO".
Tal vez no sea tan fácil "DECIDIR"
que puedo Olvidar.
"SI" puedo "DECIDIR" no quedarme pegado
 a lo que creo que  es imposible.
Y eso es lo neurótico, lo ridículo, lo "necio".
Lourdes Morales
Coach Co-Active
Desarrollo Personal y Profesional